domingo, octubre 06, 2024

¿Sentido?

 ¿Alguna vez nos hemos preguntado cuántos significados tiene la palabra "sentido"?

La RAE le reconoce doce significados a la palabra aislada y más de diez más en combinación con otro concepto.
Si le agregamos los sinónimos que admite cada significado encuentramos una red de pura polisemia.

Pero el sentido que me interesa de la palabra "sentido" (valga la redundancia...) es el de significado.

¿Cuándo las cosas que uno vive o hace tienen "sentido"..., "significado"?
¿Y cuándo no lo tienen?

Si uno se observa a sí mismo puede reconocer que las disfunciones (aun leves) de nuestros órganos internos nos ponen de "mal humor" y nos hacen perder el "sentido" de lo que hacemos....

Pero también lo externo a nosotros inciden en ello.
Una sonrisa, una caricia, un reconocimiento, un agradecimiento, aún pasajero y fugaz pueden otorgar "sentido" a sucesos que de otro modo carecerían de él.
Las respuestas a una curiosidad cualquiera...., la concreción de logros largamente esperados....

Pero ¿qué le da "sentido" a una vida?
¿Muchos pequeños "sentidos" otorgan "sentido" a una vida?

De algún modo -y aunque no siempre- el "sentido" tiene que ver con la presencia y reacción positiva de otro u otros.
Encuadrados en una cultura evanescente y carente de valores y significados trascendentes ¿qué te aporta "sentido"?.

Todo se esfuma.

Si se analiza nuestra vida desde la mirada de la complejidad, es obvio que somos emergentes de un cierto orden de organización que cuando se concreta determina que nazcamos y que cuando cesa produce nuestra desaparición.

Entre esos dos momentos somos lo que podemos ser en condiciones que no controlamos.

Pero hay cosas maravillosas que nos pasan desapercibidas.
Asombrosamente nuestro cuerpo está formado por átomos que se formaron en las estrellas y nuestra vida es una coagulación permanente de luz de sol (la fotosíntesis es el comienzo de la cadena alimentaria que nos sostiene).
Cómo decía Carl Sagan, somos "polvo de estrellas" y luz de sol.
Maravilloso ¿no?.

Pero, ¿porqué esa ideación no nos acompaña cuando las circunstancias domésticas no nos resultan afables?

Encontrar "sentido" a nuestra vida personal y a nuestras sociedades parece ser la clave necesaria para mejorar el orden en el mundo que nos toca compartir.

martes, octubre 01, 2024

Hasta donde alcanza la mano

Configuramos el mundo organizando la información que recibimos de acuerdo a los modelos culturales con los que nos hemos formado.

Los modelos culturales parecen estar en proceso de transformación, en el límite de una dinámica de criticalidad autoorganizada.

La información que recibimos, por su parte, parece estar absolutamente manipulada por los intereses que juegan al tiempo de su transmisión el resultado es un escenario tan caótico como el que vivimos.

Fijémosnos que ambos, información y modelos culturales, están hoy asociados a la dinámica de globalización, lo que la pone en manos de los grandes actores.

Los espacios locales, en cambio, están mucho más alejados de la capacidad de manipulación de las fuerzas globales.

Es pues en esos espacios en los que parece que deberíamos buscar las salidas, organizando nuestra realidad doméstica a partir de los elementos sobre los que tenemos "gobernabilidad", es decir sobre los que nos "alcanza la mano".

Recuperemos nuestros lazos próximos, usemos los recursos a la mano, afirmemos la solidaridad y estimulemos la ayuda mutua.

Esa parece ser la salida más próxima.


lunes, septiembre 16, 2024

¿Cómo imaginar el cambio?

 Para imaginar el cambio es verosímil que debamos plantearnos "qué queremos".

Pero para definir el "qué queremos" parece necesario precisar en forma previa "qué necesitamos".

Grupos interesados en el mantenimiento del (des)orden actual del mundo nos ha repetido hasta el cansancio que las necesidades son innumerables.

Pero: ¿lo son?

Si nos sinceramos con nosotros mismos puede que respondamos de modo diferente.

Es obvio que necesitamos alimento, cobijo, ropa, salud, educación, medios para socializar, un marco que nos dé razón de nuestro lugar en el mundo, modos pacíficos de resolver las diferencias y recursos de diverso tipo para satisfacer tales requerimientos.

Pero una vez satisfechos de modo frugal pero satisfactorio tales requisitos el resto es meramente optativo.

Por tanto, todo intento de imaginar un mundo más ajustado a nuestros deseos más sanos debería partir de tal reconocimiento.

El paso siguiente sería hacer un inventario de recursos y un análisis del escenario remarcando lo que está a nuestro alcance, es decir, lo "gobernable".

Para luego llegar a la acción a partir de "hacer lo que se puede con lo que se tiene, apoyado en la solidaridad y la ayuda mutua".

Planteado de ese modo no parece tan inalcanzable.

Si bien esa búsqueda necesita tener "sentido".

Y, en el estado de desaliento e incredulidad que hoy reina, la búsqueda de "sentido" se sugiere como la parte más difícil de ese diseño.

sábado, septiembre 14, 2024

Pensar el mundo de otra manera

El colapso que aparenta sufrir el mundo bien puede ser la puerta hacia otra forma de concebirlo. 

¿Y si lo que vivimos como una crisis que se muestra como terminal no fuera otra cosa que el paso a otra manera de concebir la "realidad"? 

Si asumimos que eso que llamamos "realidad" es un sistema complejo -y, como tal, sometido a sus dinámicas- veremos que esas dinámicas tienen como una de sus características lo que se llama "criticalidad autoorganizada".

Eso significa que tales sistemas se van complejizando poco a poco hasta llegar a puntos críticos, o puntos de bifurcación, en los cuales el sistema quiebra su dinámica previa para seguir uno de dos caminos: o se degrada a un nivel de menor complejidad, o salta de escala reorganizándose con un orden superior de complejidad y mayor perfeccionamiento. 

Es muy probable que hoy estemos en uno de tales puntos de bifurcación y depende nosotros incidir para que el paso siguiente sea el de mayor organización. 

Pero eso requiere de cambios de actitud en lo cultural, lo social, lo científico y lo personal sobre lo que iremos hablando.

Como iremos viendo, aun en medio del desorden en el que parecemos estar sumergidos, ya contamos con las herramientas teóricas y personales que nos permiten materializar ese futuro.

viernes, septiembre 13, 2024

Épocas extrañas

Vivimos épocas extrañas. 

Cambios sustanciales nos sumergen en territorios, paisajes y climas imprevistos para los que no parecemos estar preparados.

 Los últimos años soportamos consecuencias de una pandemia planetaria que nos cambió la vida y nos sometió de un modo imprevisto a las dinámicas de las Corporaciones que gestionan las TIC. 

La guerra en Ucrania hizo evidente la brutalidad de la lucha de la Corporaciones por extender su poder al resto del mundo bajo el paraguas de la OTAN. 

La masacre en curso en contra del pueblo Palestino por parte de Israel muestra que la capacidad humana para la crueldad no ha disminuido ni un ápice, además de exhibir el poder de un Estado, Israel, que -invocando un "poder divino"- pretende estar por sobre toda humanidad y toda legislación internacional. 

El estado de la cultura que nombramos como "civilización", al que nos han conducido las pautas morales y nuestras capacidades reflexivas muestra no sólo que ésta tiene aspectos extremadamente negativos, sino que, en muchos aspectos ha agotado sus posibilidades creativas. 

Pero haríamos mal en darnos por vencidos y en hablar del "fin de la historia". 

Porque las mismas condiciones y capacidades que nos han conducido a un estado de mundo caótico y que no comprendemos nos han aportado medios, recursos y condiciones para reconfigurar nuestra imagen de ese mismo mundo y posibilitarnos, desde otra mirada y una nueva posición que está a nuestro alcance construir, opciones y salidas más que muy promisorias. 

 Les dejo un link a un panel en el que intercambiamos opiniones sobre eso que (creo que mal) llamamos "Complejidad". 

https://www.youtube.com/live/sK5dbm_7rT0?si=l9PyF0AdmBCsbJP0 

Seguiremos conversando.